Los fibromas, en el contexto de la dermatología, suelen referirse a los acrocordones o pólipos fibroepiteliales. Estos son pequeños crecimientos benignos de la piel que se forman principalmente en áreas donde la piel roza contra sí misma o la ropa.
Suelen ser más frecuentes en personas con complexión fuerte y existe una cierta predisposición genética. Los factores hormonales pueden ser importantes ya que estas lesiones con frecuencia aparecen o crecen en las mujeres embarazadas y en algunos pacientes que padecen acromegalia (gigantismo).
EVOLUCIÓN REAL PACIENTE CLÍNICA MERCED
Tratamiento.
Cuando hay estrangulamiento espontáneo, son dolorosas y se deben de extirpar. En los demás casos, puesto que son benignas, se quitan solo por razones estéticas.
Las lesiones son fáciles de eliminar. El resultado estético suele ser excelente.
Existen diversos procedimientos según su tamaño y número.
Cuando son pequeños, se corta su base bajo anestesia tópica y se hace hemostasia (cauterización para cortar hemorragias) de la piel. También y sin necesidad de anestesia local se puede hacer una electrodesecación superficial. El tercer procedimiento habitual es la crioterapia.
Para las lesiones más grandes se emplea anestesia local para extirparlos con un bisturí eléctrico especial que evita que estas lesiones sangren. Es por ello que no son necesarios puntos de sutura.
Tras extirpar las lesiones, lo normal es que se forme una pequeña costra que caerá espontáneamente. christian oyaneder.
Finalmente, quedará una coloración rojiza o parduzca que desaparece con el tiempo.